A partir del 29 de febrero de 2020, está programado que las transmisiones televisivas abiertas de fútbol pasen a la historia, ya que en lo sucesivo sólo será posible observar los juegos de la Primera División por los canales de cable FUTV o Tigo Sports.
El primero de estos canales tendrá los derechos de transmisión de los partidos por campeonato nacional cuando los equipos masculinos Saprissa, Alajuelense, Herediano, Cartaginés, Limón, Pérez Zeledón y Grecia sean locales. En la actualidad, los derechos de transmisión de estos siete equipos se reparten entre Repretel (alajuelenses, griegos y limonenses) y Teletica (saprissistas, heredianos, cartagineses y sureños).
Mientras que Tigo Sports, canal exclusivo de la cablera del mismo nombre, ya posee los derechos de los otros cinco clubes: Santos, San Carlos, Guadalupe, Jicaral Sercoba y La U Universitarios. Rara vez ha compartido la señal de algunos partidos de estos equipos con el canal abierto Multimedios.
Este cambio hará que en al menos 460 mil hogares –con base en el último corte de la Encuesta Nacional de Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC)– ya no sea posible observar a sus equipos preferidos por televisión.
Entonces, las personas futboleras de esos hogares deberán elegir entre alguna de las siguientes opciones: escucharlo por radio como antes de 1960, ir al estadio, a algún restaurante o bar con cable que tenga los canales pagos señalados, o a casas de amigos o familiares que posean esos servicios televisivos. Con la excepción de la radio, disponible incluso en varios celulares de hoy en día, por el resto de opciones se debe pagar de una manera o de otra. Y si es visita a casas de familia o amigos con cable, eso depende de hasta dónde les llegue la buena voluntad a los anfitriones.
Estos 460 mil hogares representan aproximadamente tres de cada 10 en el ámbito nacional. Ahora bien, al subdividir por regiones de planificación (Chorotega, Brunca, Huetar Norte, Huetar Atlántico, Central y Pacífico Central), se encuentra que, de manera nominal, más de la mitad de los hogares sin cable del país pertenecen a la región Central (más de 255 mil, es decir, una cuarta parte de la zona). Por su parte en las regiones Brunca, Huetar Norte y Huetar Atlántico, existe la mayor proporción de hogares sin cable, todas ellas cercanas a las dos quintas partes.
La menor cobertura de cable está en la Pacífico Central (aproximadamente 69 mil), aunque debido a la cantidad de hogares (cerca de 96 mil) sus niveles de cobertura andan parecidos a los de la Región Central, mientras que la Chorotega destaca por tener el mayor nivel de cobertura proporcional, ya que sólo el 23% de sus hogares no posee cable.
Debe hacerse la salvedad de que las cifras anteriores no diferencian entre abonados a servicios de televisión satelital, a cableras diferentes de Tigo o las que contrataron los servicios de FUTV, por lo que el número de personas que se quedaría sin ver los juegos podría incrementarse.
Fuente: semanariouniversidad.com